ANUARIO 1998

El de 1999 es un año de significaciones y resonancias en los ámbitos más diversos. Para muchos cierra un ciclo y un milenio y es la puerta para la novedad del futuro. Desde las matemáticas, y en mayor medida para la cábala, la suma de los tres nueves, al igual que en el Apocalipsis la suma de los tres números seis, da como resultado el número sin significación que, desde otra lectura, es el número de la perfección, el de la totalidad. Para el Centro de Estudios Superiores de México y Centroamérica de la Universidad de Ciencias y Artes del Estado de Chiapas, el año en cuestión le sirve para recontar la novena entrega ininterrumpida de un ejercicio sostenido de comunicación y diálogo con la comunidad académica nacional e internacional. Ofrece ahora su Anuario 1998, introduciendo en la perfección matemática y cabalística la relatividad, la temporalidad, dos de los polos en que se sustentan la reflexión y el conocimiento. Pensar la época y pensarla desde una perspectiva crítica legado es de quienes aún creemos en la razón y en el humanismo, más acá o más allá de la tecnocracia y del utilitarismo en boga. De la antropología a la historia, de la psicología a la política y de la economía a la literatura, el Anuario 1998 del Centro de Estudios Superiores de México y Centroamérica está formado por voces diversas que, desde varios campos de estudio, son muestra del ánimo que las rige: la reflexión en torno a áreas específicas del conocimiento humano. Y no otro ha sido el propósito y la labor de este Centro, atento a la construcción del conocimiento regional, abarcativo de Chiapas, de México, de Centroamérica, del conocimiento mismo, en un afán de procurarle a la reflexión un sitio que sea cima y no sima de las Ciencias Sociales y las Humanidades. Con casi dos lustros de paciente labor, el Centro de Estudios Superiores de México y Centroamérica ha sido, con la publicación de sus Anuarios, un promotor, modesto pero singular, para la consolidación de las Ciencias Sociales y las Humanidades en esta región fronteriza de México. Ha sido una muestra, también, de la encomiable tradición intelectual de la institución que 'lo cobija: la Universidad de Ciencias y Artes del Estado de Chiapas. Análisis y diversidad temática, rigor académico y libertad creadora se hallan entre lo mejor de dicha tradición. Desde esa tradición, en el presente Anuario 1998, podrá el lector ir desde Guatemala o desde la costa al norte de Chiapas, pasando por Chamula y Zinacantan en una coordenada de lectura. O bien, podrá escoger aquella regida por la globalización, el multipartidismo, la colonización; o la que deviene ficción: amorosa, institucional, literaria.