MANGO CULTIVO, TRATAMIENTO PRE Y POSTCOSECHA PROPIEDADES NUTRIMENTALES Y FUNCIONALES Ver más grande

MANGO CULTIVO, TRATAMIENTO PRE Y POSTCOSECHA PROPIEDADES NUTRIMENTALES Y FUNCIONALES

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12 Artículos

$ 95.00 IVA incl.

Ficha técnica

Tema Producción
Autores Ballinas Díaz E.J., Vela Gutiérrez G., López Zuñiga E.J., Aguilar Najera O.A., Caballero Roque A., Meza Gordillo P.I., Pérez Jácome A., Flores Guillén L.E., Leon González J.M.
Unidad Académica Licenciatura en Nutriología
Clasificación Dewey 338.17 M35
Clasificación LC SB379 M35
Editorial (es) UNICACH
Medidas 16 x 21 cm
Páginas 69
Edición Primera
Año de Edición 2013
Colección Jaguar
Impresión/Mes Julio
Impresión Año 2013
Tiraje 750

Más información

El mango pertenece al reino Plantae, al filo Magnoliophyta, a la clase Magnoliopsida, al orden Sapindales, a la familia Anacardiaceae, género Mangifera y a la especie Mangifera indica, el mango es una fruta de zona intertropical de pulpa carnosa y dulce, sobresale el buen sabor de esta fruta. La palabra mango procede del tamil mangay que posteriormente, por influencia del portugués derivó en manga. Los mangos proceden del sudeste asiático, concretamente del norte de Birmania y del noroeste de la India, en donde hoy en día todavía encontramos especies silvestres. Los primeros textos donde se menciona este árbol y su fruto están escritos en sánscrito y fueron encontrados en la India hace 2000 años. El estudio de esta fruta a través su agronomía, producción y rendimiento es tratado en el capítulo 1, también se aborda la fisiología del mismo en su etapa de precosecha y poscosecha en el capítulo 11, y con la finalidad de mantener todas las propiedades finalmente se aborda las propiedades nutriológicas y funcionales del fruto en el capítulo 111. Con lo anterior se pretende contribuir a la utilización del mango con fines de alimentación y su efecto funcional debido a que pueden contribuir a mejorar el perfil epidemiológico nacional caracterizado por enfermedades crónico degenerativas tales como diabetes mellitus, hipertensión, dislipidemias, entre otras, así como deficiencias específicas entre las que citaremos las de las vitaminas A, C, E y folatos. Haciendo eco a lo que desde la Antigüedad se preconizaba (el alimento sea tu medicina).